La pasividad del gobierno y los alcaldes no va a mejorar la cesantía del valle
Llevamos más de un año denunciando la pasividad de nuestras autoridades, hace unas semanas se comprometieron por fin a realizar gestiones para que las inversiones y con ellas el trabajo, vuelva a nuestra región, pero vemos con angustia que el próximo será un año más complicado que este para nuestro valle del Huasco, más desempleo y más proyectos paralizados, que nuestros familiares siguen regresando de faenas de otras regiones y otros sencillamente han quedado cesantes, pues las cosas están mal en todos lados y el intendente con los alcaldes siguen esperando que la solución llegue del cielo.
Algunos dirán que es exageración lo que nosotras denunciamos una y otra vez, que los indicadores no son tan malos, pero parece que alguien arregla los datos de cesantía, pues lo que vemos en el valle es que las cosas son muy distintas al porcentaje que publican todos los meses. Da la sensación de que esas autoridades que ignoran estos reclamos viven en una burbuja, alejados de la gente y no se dan cuenta de lo que sucede en realidad. Lo peor de todo es que parece que esto que estamos viviendo no va a mejorar, pues la falta de capacidad y la tremenda pasividad que ha mostrado el gobierno y los alcaldes definitivamente no ayuda a bajar la cesantía, siguen esperando que esto se arregle sin reconocer cuál es su responsabilidad, hay proyectos paralizados porque algunos de ellos y otros que esconden la cara, no tuvieron la inteligencia para buscar soluciones.
Por eso estamos dolidas con el gobierno, pues falta poco para terminar el año y nuevamente nuestro valle se verá postergado, comprometieron públicamente a hacer una mesa de trabajo para reunirse con las empresas y reactivar los proyectos y no han cumplido. Nosotras tenemos la seguridad de que se pueden hacer mejoras a los proyectos si se quiere, pues con nuestra agrupación hicimos un recorrido por plantas similares a las de Agrosuper y vimos como usando tecnología moderna se pueden eliminar los olores, vimos como los desechos los transforman en energía limpia, además pueden usar menos agua. Pero para que eso ocurra falta que alguien se ponga los pantalones.
No queremos pasar una Navidad y el fin de año con la angustia de que por la incapacidad de algunos tendremos que sufrir un nuevo año de postergaciones. Conocemos las necesidades de nuestras familias, sabemos que las cosas se pueden hacer mejor, por eso seguimos en estado de alerta invitando a toda la comunidad a sumarse y a exigir al gobierno que cumpla lo prometido.