Último día de novena concluye con un llamado a la amabilidad y al reconciliación
Un llamado a la cortesía y la amabilidad hizo el Obispo de Copiapó, Mons. Celestino Aós, en la última jornada de novena, en la Fiesta de La Candelaria.
En su catequesis, el Obispo dijo que “la amabilidad es una obligación para todos, aún más para los cristianos”. Mencionó también que era necesario distinguir entre quien tiene un modo de ser que nos puede parecer molesto, y con quienes debemos tener tolerancia; y quien comete un pecado, ante lo cual solo cabe el rechazo. “Debemos rezar por el otro, – señaló el Obispo-, incluso por aquellos que nos hacen mal. Y rezar por nosotros mismos, porque el perdón no lo lograremos con técnicas humanas. Tenemos que pedir al Señor la fuerza para perdonar y reconciliarnos”. Tantas veces decimos que queremos ser un país reconciliado y tantas veces volvemos a encontrarnos con las heridas que se abren”.
“Con Dios, no le tememos a nada”
La misa vespertina fue presidida por el Vicario General, P. Alejandro Castillo. El sacerdote en su prédica dijo que “si estamos acá en este lugar santo es porque todos hemos tenido la experiencia de un Dios que nos escucha, que es nuestra luz y salvación”. Y agregó que la tarea es “descubrir el rostro de Dios en nuestras familias y nuestros ambientes, porque cuando nos damos cuenta de su presencia nos sentimos protegidos, fortalecidos, iluminados, gozosos. No le tenemos miedo a nada porque Él nos sostiene. Con él todo lo podemos”.
El programa de la fiesta continúa con el Encuentro con los mineros y trabajadores el sábado 4 de febrero a las 21.30 horas, la Misa Solemne el domingo a las 10 de la mañana y por la tarde, la procesión de los bailes desde las 17 horas.
El lunes 6 las misas están programadas a las 6, 7 y 8 de la mañana. A las 11 se celebrará la Misa por los chinos difuntos y la procesión de despedida comenzará a las 17 horas.