Comunidades llegan a Tribunal Ambiental a exponer daños de Pascua Lama
Demandantes contra el proyecto minero Pascua Lama testificaron ante el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago, como parte del proceso que busca detener definitivamente los trabajos que se realizan en la tercera región, y que ha significado un daño irreversible para los glaciares. Recordemos que las obras se encuentran paralizadas por una orden judicial, lo que se suma a la multa de 16 millones de dólares aplicada a la empresa por la Superintendencia de Medio Ambiente. ¿Qué novedades se anuncian como parte de este largo proceso?
Como parte del extenso proceso que diversas organizaciones sociales y ambientales mantienen contra el proyecto minero Pascua Lama, de la multinacional Barrick Gold, el Segundo Tribunal Ambiental de Santiago desarrolló la primera audiencia de revisión de pruebas que presentaron los 15 demandantes, destacando diversas comunidades de la región de Atacama.
El recurso, patrocinado por el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (Olca), y que corresponde a la primera demanda por daño ambiental presentada en los nuevos tribunales, denuncia la afectación irreparable a los glaciares del Valle del Huasco a través de 53 pruebas que consideran documentos públicos, fotografías, videos y testimonios.
¿En qué consiste la acción por daño ambiental, respecto a la destrucción de los glaciares? Lo explica el director de Olca, Lucio Cuenca: “Se debe determinar el daño, establecer responsabilidad de la empresa, y la forma de reparar los daños causados por este proyecto. Hablamos de reparación ambiental, no de reparación económica a particulares. Esos perjuicios se deben ver en otro tipo de juicios”.
A pesar que la fase de explotación de Pascua Lama aún no comienza, los cuerpos de hielo de esa zona prácticamente han desaparecido, tanto por las exploraciones como por el trabajo de las maquinarias y la acción del polvo, tal como lo confirmó el director del Departamento de Geografía de la Universidad de Chile, Francisco Ferrando.
¿Qué características hacen que este lugar requiera un cuidado especial? El académico señala que “entre 4 mil 500 y 5 mil metros de altura, en ese sector existe lo que se llama el permafrost discontinuo, presencia de hielo en la infinita red de grietas del subsuelo, que aportan agua durante el verano a vertientes y ríos. Sobre los 5 mil metros, está el permafrost continuo, donde todo espacio de grieta sobre esa altura tiene presencia de hielo permanente”.
La zona en conflicto corresponde a la localidad de Chollay, comuna de Alto del Carmen, donde existen 18 comunidades indígenas, además de la comunidad agrícola-indígena Huascoaltino. Todas ellas afectadas directamente por los trabajos de Pascua Lama. Ahí, los huascoaltinos son dueños de 360 mil hectáreas, mientras que Barrick Gold lo es de otras 50 mil.
Uno de los miembros de esta comunidad es Miguel Salazar Campillay, quien trabajó en Pascua Lama como parte de dos de las empresas subcontratadas por la minera en la perforación de los glaciares con sondajes y explosivos, se refirió a las consecuencias del proyecto minero y las condiciones del lugar.
“El problema es la contaminación del agua, perjudica la agricultura, enterró canales con sedimentos, se ha perdido vegetación, y hay un impacto social. Hay personas de acuerdo, otras en desacuerdo, están los aportes en efectivo de la empresa, pero luego no habrá agricultura y no habrá agua”.
Como parte del proceso judicial, la próxima audiencia corresponderá a los descargos de la minera Barrick Gold a través de la presentación de sus testigos, lo que se suma a la solicitud que harán los demandantes de un peritaje independiente, lo que incluye la presencia de los integrantes del tribunal en la zona del conflicto.
Fuente: Radio U de Chile.