LA MIRADA SUSTENTABLE DEL PROYECTO NUEVAUNIÓN
Cuando una compañía minera desea iniciar un proyecto de gran envergadura, dicha iniciativa implica hacer frente a una serie de desafíos con una mirada transversal de competitividad y sustentabilidad.
Y estos son conceptos que tomaron muy en serio las canadienses Teck Resources y Goldcorp para dar curso al proyecto NuevaUnión, el cual cabe recordar, nace de la combinación de los proyectos anteriores Relincho y El Morro, respectivamente.
Localizado en la provincia de Huasco, es uno de los mayores proyectos greenfield de cobre-oro-molibdeno no desarrollado en América y cuyo principal desafío a juicio del gerente de Comunicaciones y Relaciones Gubernamentales de NuevaUnión, Esteban Illanes, es el compatibilizar en su desarrollo aspectos medioambientales.
“El principal desafío de un proyecto minero de esta envergadura, cuya vida útil es de al menos 40 años, es que compatibilice en su desarrollo aspectos medioambientales, a las comunidades y entorno social, al capital humano y, por supuesto, variables tecnológicas y económicas. Debido a esto, hemos estado implementando un proceso de participación pública anticipada a través de casas abiertas y reuniones con comunidades cercanas al proyecto, con el fin de recoger sus impresiones y dar a conocer lo que es NuevaUnión”, plantea.
Dentro de los puntos a destacar en esta iniciativa – cuya inversión se espera que alcance los USD 3.900 millones – es la reducción de la huella ambiental, arista que forma parte de la esencia de NuevaUnión, “ya que al unir dos proyectos se generan una serie de efectos positivos”, sostiene el gerente de comunicaciones del proyecto.
Además, añade que “gracias a esta unificación, utilizaremos una sola red de caminos, una línea de transmisión de energía y un puerto en vez de dos. Desde el punto de vista de infraestructura, construiremos una sola planta concentradora y una zona de relaves. Asimismo, comparado con los proyectos por separado, se reduce el consumo de agua y energía”.
Respecto a la utilización del recurso hídrico, en un comienzo se indicó que incluiría la construcción de una planta desalinizadora, sin embargo, en la actualidad esa alternativa no está definida, “ya que también está en evaluación la posibilidad de comprar agua desalinizada a un tercero”, asegura Illanes.
Ingenierías y EIA
Con su centro de operaciones en Chile y oficinas en Santiago, Vallenar y Alto del Carmen, el proyecto está avanzando a paso firme con el desarrollo de la ingeniería de prefactibilidad, que está en su fase final. “Estimamos que comenzaremos a desarrollar el estudio de factibilidad en marzo de este año” puntualiza Jaime Illanes.
Respecto al Estudio de Impacto ambiental agrega que contemplan presentarlo en el segundo semestre de este año.
En relación a la fase de ejecución y la fuerza laboral requerida, “se estima que NuevaUnión generará 4.000 puestos de trabajo durante el período de construcción y 1.400 empleos directos durante la fase de operación” comenta el ejecutivo.
Participación ciudadana
Dentro de este proceso, Teck y Goldcorp, han implementado una serie de reuniones periódicas con comunidades indígenas, no indígenas y grupos de interés que están ubicadas en las inmediaciones al proyecto.
“Hasta ahora, hemos realizado cuatro rondas de casas abiertas en las localidades de Vallenar, Huasco, Alto del Carmen, Freirina, Maitencillo y Copiapó. En este proceso, hemos ido informando acerca de los avances y definiciones del proyecto, además, de recibir consultas, dudas y sugerencias de la comunidad”, señala Esteban Illanes, quien se declara “muy satisfecho con los resultados obtenidos hasta ahora”.
Al respecto, el gerente de comunicaciones del proyecto, destaca que durante el primer semestre de 2018 realizarán la quinta ronda de casas abiertas, en las cuales “daremos a conocer a la comunidad los impactos y las medidas de mitigación y compensación”.
Fuente: Portal Minero