Mons. Celestino Aós: «Es hermoso saber que puedo contar con la oración de ustedes»
La celebración eucarística con motivo de su segundo aniversario como Obispo de Copiapó, tuvo lugar en la Catedral, el pasado martes 18 de octubre. En ella, monseñor Celestino fue acompañado por el Arzobispo de La Serena, Mons. René Rebolledo, y el Obispo de Illapel, Monseñor Jorge Vega.
El padre obispo Celestino dedicó parte de su homilía a referirse a San Lucas, en el día de su fiesta, señalando que «es el apóstol de la misericordia». «Cuántas veces Lucas habrá repetido las enseñanzas de Jesús- dijo,- hablando de sus parábolas, de su misericordia, hasta que un día se sienta a escribir el evangelio que conocemos, y el Libro de los Hechos. No habla de sí mismo, toda su vida tiene sentido desde Jesús».
«Al amparo de Lucas comenzó mi servicio en este ministerio -continuó- y siento la misma sensación que debió sentir Lucas: que no he cumplido el evangelio, porque por muy santos que seamos, frente al altar debemos reconocer que somos pecadores y débiles».
El Obispo dijo que una de sus tareas es proclamar este evangelio y tratar de vivirlo. «El Obispo será Obispo con y para la comunidad- señaló,- y es hermoso saber que puedo contar con la oración y comprensión de ustedes». También recordó al obispo emérito de Copiapó, Monseñor Gaspar Quintana, para quien tuvo palabras de agradecimiento.
«AGRADECER A DIOS EL DON
DE PASTOR DE DON CELESTINO»
En la parte final de la misa, tomó la palabra Monseñor Rebolledo, para «agradecer a Dios el don de Pastor de don Celestino». Contó a la asamblea que su visita junto a la del Obispo de Illapel se debe a un encuentro de los obispos de la Provincia Eclesiástica para reflexionar sobre la vida pastoral, agradeció la acogida de la comunidad y dijo «confiamos en la oración de ustedes».
Por su parte, Monseñor Vega dijo sentir una gran alegría «por volver a Copiapó para compartir esta celebración y la oportunidad de reunirnos como Provincia para reflexionar sobre la actividad pastoral», agregando que «estamos buscando cómo colaborar y superar juntos los diversos desafíos de nuestra Iglesia».
Después de la Misa la asamblea puco compartir con los Pastores en una animada convivencia en el patio del Obispado.